Tendría que dar clases magistrales sobre la cultura del esfuerzo en universidades, porque su vida es el reflejo de un “milagro”. No milagro de origen divino, sino de hecho inexplicable por su comienzo y desarrollo. 

Ha sabido contar y cantar sesenta años de historia, porque es, sobre todo, eso: un contador de historias. Unas con el microscopio y otras con el telescopio ,que para eso sirve la experiencia.

Hizo tres carreras: Ciencias Políticas, Publicidad y Periodismo. 

En el año 66, intentó hacerse un hueco como cantautor. Llegó a actuar en El Gran Musical y fue telonero de Serrat. Cuando iba a firmar contrato con una discográfica, le dijeron que habían fichado a un chico filipino y no podían tener dos artistas con el mismo estilo. El chico que le cerró el paso era Luis Eduardo Aute.

Empezó a escribir canciones, se dio de alta en la SGAE. No se podía imaginar que hoy sería el socio veterano con más obra. Más de 1.300 temas, 800 publicados y 300 adaptaciones. 

Es en 1973, cuando consigue su primer éxito con “Ven, ven”, una canción hecha a medida de una Marisol, que estaba en su plenitud. Comienza su colaboración con grandes artistas, como Demis Roussos o Salvatore Adamo.

Escribe y vive, vive y escribe canciones. Es un contador de estrellas para las estrellas, entre ellas, Paloma San Basilio. 

En 1989, entra a formar parte del grupo fundador de EL MUNDO. Para este periódico ha cubierto cuatro Olimpiadas, además de un sinfín de eventos deportivos y experiencias inolvidables.

Compuso otro exito: “Mamá quiero ser artista”, para Concha Velasco. En 1988, preparando un disco con El Dúo Dinámico, crea con Manuel de la Calva una canción emblemática: “RESISTIRÉ”.

Escribe para Marta Sánchez más de 49 canciones, y también para Paulina Rubio. Y varios libros: “Caldera de pasiones”, sobre fútbol; “En la brecha”, del Dúo Dinámico; “Anécdotas de fútbol” y “Del choque al toque”.

En Cadena100 tiene más de 35 millones de reproducciones y sigue erguido frente a todo para seguir viviendo, casi con las mismas expectativas que el día que se presentó en El Gran Musical, con el propósito de ser cantautor.

Un lujazo de invitado en nuestros almuerzos.

Fernando Corella