Los románticos se inventaron el mar como refugio, y allí donde hay más mar que en ningún sitio nació Cristina, en Canarias.

Casi jugando empezó tocando la trompeta y terminó licenciada superior en canto en el Conservatorio Profesional de Las Palmas.

Ganó un premio especial del jurado cantando Zarzuela. Actuó como solista en una orquesta porque, desde siempre, en la cabeza le suenan muchos ritmos: rock, funky, jazz, boleros, ópera o música latina. José Vélez y Braulio descubrieron su fabulosa voz y se la pidieron prestada en sus directos. Recorrió escenarios pero sin salir de las islas. 

Casi por casualidad recibió un mensaje para ir a un casting. Estaban buscando una voz para un espectáculo. Íñigo Irigoyen (tenor), la recibió con indiferencia, pero cuando escuchó su brillo, entendió que era un diamante, un artículo de lujo de los que no se encuentran. Quedó cautivado y así sigue porque son pareja y da gusto verles juntos. 

Cantaron unidos en cientos de espectáculos, hasta que Íñigo a escondidas la apuntó en la primera edición del Concurso de televisión Got Talent España. 

Llegó al teatro y, sin querer, se vio en el escenario frente a Edurne, Risto y Jorge Javier Vázquez. Comenzó cantando lírico y tras un giro inesperado y sorprendente lo cambió a por rock y… se acabó. ¡¡¡PASE DE ORO!!! ¡¡¡100 millones de visualizaciones en una semana!!! Otra actuación magistral y ganó el concurso.

Dos años después se presentó en La Voz (México). Una sola nota y… tiene el récord de menor tiempo en darse la vuelta los cuatro coaches. Después de unas actuaciones extraordinarias ganó el concurso que daba derecho a una carrera discográfica. Pero las condiciones eran la invitación a una lejanía imposible, a miles de kilómetros de su hijo y sus islas. Era levantar castillos de arena sin playa ni caracolas.

Recibió la invitación para participar en el America’s Got Talent Champions, con los 50 mejores artistas de los 15 años del programa y es la única cantante que llegó al top 5. También la reclamaron del Got Talent Mundial en China. Allí decidió lanzar un arpón a la luna cantando “Carmen” en inglés, francés y chino. ¡Exitazo! Esta vez fue David Foster el que quedó cautivado y le dio su “Pase de Oro”.

La pandemia lo frenó todo, aunque aprovechó el tiempo para componer. Volvieron sus grandes actuaciones, “Tu cara me suena”, su disco “Superstar” y las actuaciones en la Gran Vía madrileña. Sigue triunfando con su naturalidad auténtica.

Un almuerzo que no olvidaremos porque el postre lo puso Cristina cantando “O Mio Babbino Caro”. Soy testigo, vi correr lágrimas de emoción entre mis compañeros mezcladas con el sonido único de una voz única.

Fernando Corella