Tertulia que se ha convertido, dicho sea de paso, en el referente político de las mañanas radiofónicas del fin de semana.

Un ingeniero metido a periodista. Y como periodista, un investigador con la capacidad analítica de un ingeniero. Él dice que solo es un hobby, pero me aventuraría a decir que con ánimo provocador, pero provocador de los buenos.

Un pajarito me ha contado que se declara agnóstico y republicano, que desprecia la mala educación y el fútbol. Que le gustan los quesos fuertes como el Gamoneu y que es un gourmet haciendo tablas de quesos con todas las estrellas Michelin posibles. 

Que lleva un cocinero dentro, capaz de buscar y encontrar recetas incluso en el fango de las Redes Sociales y compartirlas entre sus seguidores en ellas. Y ojo, este último  no es tema baladí; en su cuenta de Twitter, que recomiendo seguir, acumula la mareante cifra de más 346.000 seguidores... y subiendo.

Mantiene que los medios de comunicación tradicionales han muerto; ahora son las redes sociales las que marcan el pulso diario de la sociedad y que, a través de ellas, tenemos el deber y el derecho de pelear por valores que si bien no han desaparecido, sí parecen invisibles en la escena pública actual, como la lealtad, el derecho a la vida, las tradiciones, el amor para toda la vida y la libertad de poder expresar nuestra opinión sin el miedo a que te cuelguen cualquier ridícula y peligrosa etiqueta.

Desde esta cuenta analiza a diario, con certera precisión, la actualidad política de nuestro país, diseccionando cada noticia, opinión o sentimiento personal de manera tan palmaria que cualquiera pueda entender su mensaje, esté de acuerdo o no. Aunque serio y educado, no está exento de un fino sentido del humor, con toques irónicos con los que, de forma inteligente, replica a sus detractores.

En su faceta de escritor tiene varios libros en su haber, como Los enigmas del 11M. ¿Conspiración o negligencia? y Las mentiras del 11 M. También es autor de varios tratados sobre tecnología informática. Y su último libro titulado La dictadura infinita

El 11 de marzo marcó un antes y un después en nuestro país. Luis ha destacado por ser uno de los personajes que más han sobresalido en la búsqueda de la verdad, cuestionando la versión de los hechos que nos quisieron vender, o nos vendieron.

Personaje interesante, inteligente y cuya seriedad es su seña de identidad, merece la pena leerle y escucharle cada día en los distintos medios en los que colabora.

Susana Cañil

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